Definida por el clima frío y los suelos calcáreos, la parcela de 1,3 hectáreas de Pinot Noir es fundamental para la creación de un vino que persigue la pureza, la austeridad y la tensión. Enfocados en lograr sensaciones de texturas finas en boca y profundidad.
El Pinot Noir sostiene una energía delicada, expresada a través de su textura y tensión, mientras conserva una familia aromática de bayas rojas como frambuesa y grosella negra, junto con notas de violetas y taninos de grano fino.