En 1940 el abuelo de la enóloga Estela Perinetti compró un terreno en la zona fría de Tupungato para producir
Semillón y lo llamó Finca Mangato. Algunas décadas después, su primer hijo, el Dr. Héctor Perinetti, decidió
plantar variedades tintas en este viñedo. Más tarde, Estela junto a su madre, Estela Armando, eligieron el lote
más alto (1.300 msnm) y más pedregoso para producir el primer Malbec del viñedo. Hoy, Las Estelas es un
proyecto con tres vinos que honran la actitud femenina y el amor por el vino de esta gran enóloga argentina.