La uva Criolla es parte de la historia Argentina, y quisimos ensayarla trabajándola en la alta gama.

Buscamos un viejo viñedo en Parral en Vista Flores, Tunuyán sobre un suelo arenoso y de muy bajo rendimiento.

Fue elaborada en tanques con pisoneo manual, y añejada en concetro sobre sus borras por 10 meses para aportar boca.

Es un vino distinto y para nosotros super versátil e interesante. De color rojizo tipo cereza con tintes violáceos. En nariz es fresco y frutado, con aromas a cerezas y guindas, con algunas notas especiadas como hierbas de campo, y algo mineral como grafito que recuerda su añejamiento en concreto. En boca es jugoso, con textura, fresco y de mucha amabilidad y largo de boca.